La relación entre el TDAH y el sueño
Durante mucho tiempo el equipo de Atencion.org hemos estado interesados en la relación entre el TDAH y el sueño. Tanto en adultos como en niños con TDAH, los problemas de sueño son significativamente más comunes que en la población general.
Es más, los síntomas del insomnio y los síntomas del TDAH, incluida la dificultad para concentrarse, los cambios de humor y la hiperactividad, suelen ser muy similares, tan similares que puede ser difícil distinguir entre los dos.
Desde hace mucho tiempo se reconoce que los problemas del sueño y el TDAH tienen una relación. Pero, también han tendido a verse como condiciones separadas. Actualmente algunos investigadores sugieren que la separación puede no ser del todo precisa y que los problemas del sueño y el TDAH serían dos caras de una moneda.
Una teoría señala que los síntomas del TDAH, siguen operando incluso cuando estamos durmiendo. Las alteraciones del sueño serían indicativas de los problemas de activación conductual y del estado de alerta en el propio TDAH.
Otra teoría vincula los síntomas del TDAH con alteraciones en la función del ritmo circadiano y la tendencia entre muchos adultos y niños con TDAH a estar más alerta durante las horas de la noche.
A veces los trastornos del sueño se han atribuido incorrectamente a los medicamentos estimulantes que son a menudo la primera opción para tratar el TDAH. Algunos expertos postulan que , incluso, para algunos adultos con TDAH el mejor tratamiento es una dosis de medicamentos estimulantes 45 minutos antes de acostarse.
¿Qué es el TDAH?
Demos un paso atrás y veamos brevemente los conceptos básicos del TDAH. El trastorno por déficit de atención con hiperactividad es una condición que afecta la actividad cerebral y produce síntomas conductuales que incluyen:
- Desatención
- Hiperactividad
- Cambios de humor
- Impulsividad
Los síntomas asociados con el TDAH a menudo se notan cuando el niño comienza la escuela. En aproximadamente el 50-65 por ciento de los casos, el TDAH infantil continúa hasta la edad adulta.
Los niños tienen aproximadamente tres veces más probabilidades que las niñas de ser diagnosticados con TDAH.
Los síntomas del TDAH pueden diferir entre los géneros, siendo las niñas menos propensas a exhibir hiperactividad y agresión , y más propensas a exhibir algunos de los síntomas menos abiertamente perturbadores, incluida la falta de atención.
Algunos científicos piensan que esto puede explicar, al menos en parte, por qué los niños son diagnosticados con más frecuencia que las niñas.
¿Qué tan común es el TDAH?
Las estimaciones varían, pero los estudios indican que el TDAH afecta aproximadamente del cinco al siete por ciento de los niños y más del tres por ciento de los adultos.
El diagnóstico de TDAH en niños y adultos ha ido en aumento durante varios años. El diagnóstico de TDAH en adultos puede ser complicado, en parte debido a la presencia de otras afecciones con síntomas similares, como abuso de sustancias , depresión y ansiedad .
El diagnóstico de TDAH en niños también puede ser complejo debido a la presencia de otras afecciones, incluidos problemas de audición o vista, la presencia de dificultades o diferencias de aprendizaje , ansiedad, depresión o cambios en la vida familiar o la rutina del niño.
Debido a que los síntomas de la privación del sueño y los trastornos del sueño a menudo son muy difíciles de distinguir de los síntomas del TDAH, tanto los adultos como los niños pueden estar en riesgo de un diagnóstico erróneo de TDAH por lo que es fundamentalmente un problema del sueño.
Los cuatro grandes problemas del sueño con TDAH
Muchos adultos con TDAH saben que la conexión entre su condición y los problemas del sueño es real: cuando quieren dormir, están despiertos; cuando quieren estar despiertos, están dormidos.
Los cuatro trastornos del sueño más comunes asociados con el TDAH son:
- Dificultad para conciliar el sueño con TDAH
Aproximadamente tres cuartas partes de todos los adultos con TDAH informan que no pueden «apagar mi mente para poder dormirme por la noche». Muchos se describen a sí mismos como «noctámbulos» que obtienen una explosión de energía cuando se pone el sol.
- Sueño inquieto
Cuando las personas con TDAH finalmente se duermen, su sueño es inquieto. Dan vueltas y vueltas. Se despiertan ante cualquier ruido en la casa. Puede que sus compañeros de dormitorio opten por dormir en otra cama. El sueño no es refrescante y se despiertan tan cansados como cuando se acostaron.
- Dificultad para despertarse con TDAH
Los adultos con TDAH informan que se despiertan múltiples veces hasta alrededor de las 4 am. Luego caen en un sueño, del cual tienen una dificultad extrema para despertarse.
Las personas con esta dificultad suelen ser irritables, incluso combativas, cuando se las despierta antes de estar listas. Muchos de ellos dicen que no están completamente alerta hasta el mediodía.
- Sueño intrusivo con TDAH
Mientras las personas con TDAH están interesadas o desafiadas por lo que están haciendo, no demuestran síntomas del trastorno. (Este fenómeno es llamado hiperconcentración o hiperfoco y a menudo se considera una característica del TDAH).
Si, por otro lado, un individuo con TDAH pierde interés en una actividad, su sistema nervioso se desconecta en busca de algo más interesante. A veces, esta desconexión es tan brusca que induce una somnolencia repentina, incluso hasta el punto de quedarse dormido.
Lo hemos visto en el estudiante en la parte de atrás del salón de clases que repentinamente se estrella contra el pupitre, después de «quedarse dormido», probablemente puede ser alguien con TDAH, que ha desconectado.
Terapia cognitivo-conductual en lugar de pastillas para dormir
La terapia cognitivo-conductual para los trastornos del dormir, es un tratamiento eficaz para los problemas crónicos del sueño y generalmente se recomienda como primera línea de tratamiento.
La terapia cognitivo-conductual para el sueño y el insomnio es un programa estructurado que lo ayuda a identificar y reemplazar los pensamientos y comportamientos que causan o empeoran los problemas del sueño con hábitos que promueven un sueño profundo.
A diferencia de las pastillas para dormir, terapia cognitivo-conductual lo ayuda a superar las causas subyacentes de sus problemas para dormir.
Para identificar la mejor manera de tratar su insomnio, te pediremos que lleves un diario detallado del sueño durante algunas semanas.
¿Cómo funciona la terapia cognitivo-conductual para el insomnio?
La parte cognitiva de terapia cognitivo-conductual le enseña a reconocer y cambiar las creencias que afectan su capacidad para dormir. Este tipo de terapia puede ayudarlo a controlar o eliminar los pensamientos negativos y las preocupaciones que lo mantienen despierto.
La parte conductual de terapia cognitivo-conductual lo ayuda a desarrollar buenos hábitos de sueño y evitar comportamientos que le impiden dormir bien.
En este libro encontrarás algunas de estas técnicas de terapia cognitivo-conductual:
Terapia de control de estímulos. Este método ayuda a eliminar los factores que condicionan su mente para resistir el sueño. Por ejemplo, es posible que le enseñen a establecer una hora constante para acostarse y despertarse y evitar las siestas, usar la cama solo para dormir y tener relaciones sexuales, y salir de la habitación si no puede irse a dormir en 20 minutos y regresar solo cuando esté soñoliento.
Restricción del sueño. Acostarse en la cama cuando está despierto puede convertirse en un hábito que lo lleve a dormir mal. Este tratamiento reduce el tiempo que pasa en la cama, provocando una privación parcial del sueño, lo que hace que se sienta más cansado la noche siguiente. Una vez que su sueño ha mejorado, su tiempo en la cama aumenta gradualmente.
Higiene del sueño. Este método de terapia implica cambiar los hábitos básicos de estilo de vida que influyen en el sueño, como fumar o beber demasiada cafeína al final del día, beber demasiado alcohol o no hacer ejercicio con regularidad. También incluye consejos que le ayudarán a dormir mejor, como formas de relajarse una o dos horas antes de acostarse.
Mejora del ambiente del sueño. Esto ofrece formas en las que puede crear un ambiente confortable para dormir, como mantener su dormitorio tranquilo, oscuro y fresco, no tener un televisor en el dormitorio y ocultar el reloj a la vista.
Entrenamiento de relajación. Este método te ayuda a calmar tu mente y tu cuerpo. Los enfoques incluyen meditación, imágenes, relajación muscular y otros.
Permanecer pasivamente despierto. También llamada intención paradójica, implica evitar cualquier esfuerzo por conciliar el sueño. Paradójicamente, preocuparse por no poder dormir en realidad puede mantenerlo despierto. Dejar ir esta preocupación puede ayudarlo a relajarse y hacer que sea más fácil conciliar el sueño.
Terapia cognitivo-conductual y medicación
Los medicamentos para dormir pueden ser un tratamiento eficaz a corto plazo; por ejemplo, pueden proporcionar un alivio inmediato durante un período de gran estrés o dolor. Se han aprobado algunos medicamentos para dormir más nuevos para un uso más prolongado. Pero pueden no ser el mejor tratamiento para el insomnio a largo plazo.
La terapia cognitivo-conductual para el insomnio puede ser una buena opción de tratamiento si tiene problemas de sueño a largo plazo, le preocupa volverse dependiente de los medicamentos para dormir o si los medicamentos no son efectivos o causan efectos secundarios molestos.
A diferencia de las píldoras, la terapia cognitivo-conductual aborda las causas subyacentes del insomnio en lugar de solo aliviar los síntomas. Pero se necesita tiempo y esfuerzo para que funcione. En algunos casos, una combinación de medicamentos para dormir y CBT-I puede ser el mejor enfoque.
Insomnio y otros trastornos
El insomnio está relacionado con una serie de trastornos de salud física y mental. La falta continua de sueño aumenta el riesgo de problemas de salud como presión arterial alta, enfermedades cardíacas, diabetes y dolor crónico.
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